Más grande que Machu Picchu, Choquequirao descansa prácticamente desolada en la cima del cañón más profundo de América. Aquí no llegan turistas en cómodos trenes, sino aventureros reales que, luego de días de extenuante caminata, se encuentran con el silencio absoluto de sus misteriosas ruinas. Arqueólogos han estimado que sólo un 40% de la ciudad ha sido expuesta, con diversos proyectos gubernamentales en camino para exprimir su potencial turístico. Por eso debes hacer el trekking a Choquequirao ahora, antes de que las multitudes te roben de un encuentro auténtico con nuestro pasado histórico.


¿En qué consiste el trekking a Choquequirao?



El Cañón del Apurimac es el más profundo de América.
El trekking a la ciudadela Inca comienza en el pequeño pueblo de Cachora, para atravesar el cañón del Apurimac hasta llegar a las ruinas de Choquequirao. Es un circuito difícil, 3 veces más exigente que el clásico Camino del Inca, ya que en un día bajas 1 kilómetro de pendiente (que toma 5 horas aproximadamente) y al día siguiente lo vuelves a subir (y luego tienes que volver). Pero el esfuerzo es recompensado a cada segundo gracias a las impactantes vistas que ofrece el cañón. Mientras en Machu Picchu luchas codo a codo con 2500 turistas por sacar la mejor foto, a Choquequirao llegan aproximadamente 30 personas al día en temporada alta, convirtiéndolo en la verdadera ciudad perdida de los Incas.

¿Cómo hacer el trekking a Choquequirao?


En Machupicchu packages e Cusco (incluye la vuelta), y otro de mayor extensión que conecta Choquequirao con Machu Picchu en un trekking de 8 días. La información de este artículo corresponde al circuito clásico. Es importante mencionar que, para alivianarte la carga, existen arrieros que cargan el equipamiento de campamento y tu mochila en mulas, desde un camping hasta el próximo.


Información y ruta

Duración4 días
Distancia32 kilómetros
DificultadAlta
 SenderosEl sendero está bien mantenido y es fácil seguir.
Altura máxima3050 msnm
Ticket de ingreso60 soles por persona / 30 soles estudiantes con tarjeta ISIC
Mejor épocaMayo a octubre.

Día 1



El sendero a Choquequirao se encuentra muy bien marcado.
Desde Cusco se viajan 4 horas hasta llegar a Cachora (2800 msnm), un pequeño pueblo de 3500 habitantes rodeado por impresionantes picos de montañas nevados. Aquí se almuerza y se compran los últimos suministros antes de comenzar la travesía. Luego de 15 minutos de caminata hasta el mirador de Capuliyoc comienza el descenso por el cañón del Apurimac. Es un sendero bastante empinado de aproximadamente 5 horas. En el trayecto se pasan por impactantes miradores hacia el cañón, donde el viento frío azota a velocidades que te harán tambalear. Una vez que comienzas a acercarte al río Apurimac, el calor, la abundante vegetación y los rítmicos sonidos de grillos a tu alrededor comienzan a hacerse notar.  Luego de pasar el primer sector de camping en Chiquisca, se avanza una hora más hasta playa Rosalina (1550 msnm) donde finalmente se descansa hasta el día siguiente.

Día 2



Cruzando el río Apurimac. Foto por sfgamchick.
Temprano en la mañana se cruza el río Apurimac en un andarivel que se desliza a no más de tres metros por encima de sus aguas. Luego comienza uno de los tramos más duro de trekking, ya que toda la distancia que se bajó el primer día, se debe volver a subir (de 1550 msnm a 3050 msnm). El circuito en sí es un constante zig zageo ascendente bajo un calor intenso, por lo que la hidratación es elemental. Luego de aproximadamente 3 o 4 horas se llega a Marampata, una pequeña localidad a 2800 msnm donde viven no más de 15 familias. Es realmente admirable cómo logran sobrevivir en un punto tan aislado, donde el único medio de transporte para obtener suministros son las mulas de los arrieros.
ACTUALIZACIÓN: Ahora se encuentra operativo un puente colgante peatonal en Playa Rosalina, por lo que los tours ya no cruzan por el andarivel.


Las mulas pueden ser tu mejor aliado a la hora de realizar el trek.
Luego de un merecido descanso en Marampata se inicia el tramo restante de 40 minutos hasta Choquequirao. La sensación al llegar a las ruinas te dejará sin palabras, pues tendrás la mítica ciudadela prácticamente para ti solo (en promedio solo 2 grupos la visitan por día). En vez de escuchar turistas y flashes fotográficos, aquí sólo está presente el sonido del viento y de la naturaleza, por lo que nada se intempondrá en tu experiencia. Se pasa toda la tarde recorriendo las distintas andenerías, acueductos, plazas ceremoniales, miradores, viviendas y templos ceremoniales, separados por escalinatas de todo tamaño e inclinación. Si tienes suerte, puedes ver incluso el vuelo de cóndores. Una vez finalizada la visita, se emprende rumbo de vuelta hasta Marampata, donde se acampa antes de iniciar el descenso.


Hasta el momento, sólo un 40% de las ruinas de Choquequirao han sido descubiertas.


Día 3 y 4



Marampata.
Desde Marampata se toma el mismo sendero de vuelta hasta el río Apurimac. El descenso de entre 4 o 5 horas culmina en Chiquisca, donde se acampa por última vez. Nuevamente nos encontramos cerca de los 1500 msnm, listos para subir los más de 1000 metros hasta llegar a Cachora. El trayecto comienza muy temprano en la mañana para evitar el intenso calor que se presenta en las horas de la tarde. Una vez en Cachora se toma el transporte de vuelta a Cusco.

¿Por qué debes hacer el trek a Choquequirao?



Aparte de experimentar inmensas ruinas con una tranquilidad y privacidad que jamás encontrarías en Machu Picchu, el trekking a Choquequirao supone un increíble desafío personal, con vistas durante el trayecto que te quitarán el aliento. Lamentablemente (para algunos, incluido yo), el gobierno peruano contempla la construcción de teleféricos hasta la ciudadadela, por lo que no pasarán tantos años antes de que Choquequirao se transforme en otro parque popular al estilo de Machu Picchu.
Inundado por una sensación de satisfacción al completarlo, el trekking a Choquequirao es una aventura que jamás olvidarás. Nuestra recomendación es que aproveches de hacerlo lo antes posible (antes de que se vuelva demasiado popular) y que luego convenzas al resto de tus amigos para que se atrevan.